La preparación del pastor evangelista

La naturaleza del trabajo del pastor de iglesia no le permite actuar como un evangelista de tiempo completo. Por lo tanto sugiero que reserve sus talentos evangelístico para una campaña evangelística anual de cierta envergadura. Puede ser necesario que el pastor salga de su caparazón pastoral (si es que éste existe) y siga el consejo del apóstol de hacerse todas las cosas para salvar a algunos.

Para el evangelista las siguientes sugerencias son puramente elementales, hasta diría innecesarias, pero el pastor puede hallarlas de utilidad. ¡Lea cabalmente el libro Evangelismo!Comience una serie de ayunos una vez por semana, orando por la carga, la visión, los obreros, el presupuesto, la ubicación, las iglesias implicadas. Semanas antes del comienzo de la campaña vea de poner la mayor parte de las responsabilidades pastorales sobre sus ancianos o pastor ayudante (si tiene la suerte de tenerlo) y concéntrese en la tarea de “convertirse” en evangelista. Debe haber una inversión en sus engranajes mentales.

Donde ello sea posible, el evangelista debiera ausentarse (antes que la campaña comience) por una o dos semanas para descansar, para librar su mente de tensiones pastorales, para orar en busca de poder para recibir una visión fresca y para hacerse “todo”. Tres semanas antes que comience la campaña debe arreglar que su pastor ayudante, anciano o predicador invitado predique los sermones sabáticos. Esto le permitirá a los feligreses escuchar otra voz que la suya, y en la noche inicial podrán incluso estar contentos de oírlo de nuevo.

¡Hable fe! No tema hacer un comentario público de lo que Ud. quiere que el Señor haga. Rara vez él chasquea a un hombre consagrado.

Estudie la zona a trabajar. ¡Conozca a la gente! Un predicador que descuide este detalle puede encontrarse a sí mismo predicando en una ciudad equivocada.

¡Estudie su material! Revise antiguos sermones. Descubra nuevas formas de acercamiento.

Conozca los siete secretos para el éxito en el evangelismo: (1) Perfecta fe y confianza en Cristo; (2) sincero ayuno y oración; (3) consagración completa y entrega total; (4) purificación de los motivos del predicador; (5) humildad de corazón; (6) organización y planificación; (7) trabajo duro.

¡Póngase un blanco! Siendo que Dios promete números, y el cielo estará compuesto de números, ¡pida números! Cuantos más consiga, más serán los que queden después que el cernidor haya hecho su obra.

Fíjese un objetivo. Además de amonestar a los perdidos y de hacer discípulos, nuestras campañas debieran ser algo más que simples “esfuerzos”. Es mi opinión que debiéramos tratar de establecer monumentos para la obra, fortaleciendo algunas congregaciones, estableciendo nuevas, creando bases para nuestros servicios especializados, para mencionar unos pocos.

PREPARACIÓN ESPIRITUAL DE LA FELIGRESÍA

Ocho semanas antes del comienzo lanzamos la campaña de ganancia de almas. Esto se hace en la hora del sermón. Se envía una carta pastoral a cada familia anunciando este gran día e instando a asistir. Yo predico un mensaje profundamente espiritual, como “Si crees, verás la gloria de Dios”; “Boga mar adentro”; “¿Puede el Omnipotente ser limitado?”, etc.

Después de ese mensaje se celebra una reunión de oración. Tres o cuatro personas, previamente avisadas, hacen fervientes peticiones al Cielo.

Entonces se distribuyen a cada fiel hojas mimeografiadas con el siguiente contenido:

  1. Himno oficial de la campaña.
  2. Horario de los días de ayuno y oración (deben ser tres).
  3. Fechas de las reuniones de oración de medianoche (tres).
  4. Fecha de la reunión de oración de toda la noche (una).
  5. Fechas de los servicios de comunión (dos).
  6. Horario de la cadena de oración de día.
  7. Cómo deben conducirse los miembros durante la campaña.
  8. Lista de cosas por las cuales orar.
  9. Un cupón para ser firmado y recogido en el cual se expresa el deseo de consagración personal.
  10. Lugar para que cada uno haga una lista personal de oración. Pedimos que se pongan los nombres de veinte personas que se desea ver bautizadas en esa campaña. El interesado coloca esa lista en el lugar de su casa donde ora y pide por esas personas durante su devoción personal. Se compromete a usar todas sus energías para la salvación de esos veinte durante la campaña.
  11. Una lista de declaraciones del espíritu de profecía acerca del papel y la responsabilidad de los laicos en nuestros esfuerzos en las ciudades. (Evangelismo, págs. 81-84, contiene muchas gemas apropiadas.)

Se comienza un cursillo de instructores bíblicos de seis semanas para preparar a los obreros voluntarios de nuestra congregación. La clase debiera tener entre doce y veinte alumnos. Donde sea posible, antes de nuestras campañas grandes, realizamos un reavivamiento de siete días de duración.

PREPARACIÓN Y ORGANIZACIÓN

Dos semanas después del lanzamiento espiritual se hace el lanzamiento organizativo. Se predica un mensaje altamente espiritual. Tema sugerente: “El pueblo tuvo ánimo para trabajar” (Neh. 4:6).

La atmósfera está cargada de expectativa. Como soldados armados para la batalla, nos detenemos para agrupar nuestras fuerzas. Es un día glorioso en que sentimos la responsabilidad y el deseo de trabajar para el reino de Dios.

Se canta el himno oficial. Entonces distribuimos un formulario en el cual están enumerados los diferentes grupos de trabajo.

La siguiente es una lista de los grupos de trabajo, con una explicación acerca de su función:

  1. Distribuidores de volantes (150 miembros)

Divídase el territorio en zonas.

Prepárese un plano detallado para el jefe de cada zona.

Desígnense los jefes de zona.

Pídasele a cada obrero que dedique dos horas semanales durante diez semanas.

Cada grupo (zona) se pone un blanco de almas.

  • Comisión de teléfonos (medio económico y eficaz de propaganda) Divídase el territorio en zonas. Desígnense jefes de zona.

Dense a cada grupo listas de nombres y de números telefónicos.

Cada miembro recibe cincuenta nombres y números.

Cada miembro recibe mensajes especiales preparados.

Hora de llamada: sábado de tarde y domingo de mañana.

  • Comisión de transporte. Se les pide a los miembros que dediquen sus vehículos para transportar miembros y amigos a las reuniones cada noche.
  • Comisión de comedor. Los miembros se turnan cada sábado para proporcionar comidas a los obreros librándolos de tener que, prepararse alimentos en sábado.
  • Servicio de guardería. Los  niños dieciocho meses a ocho años son cuidados en una carpa especial para que sus madres puedan asistir a las reuniones.
  • Serenos. De tres a cinco hombres que se vayan turnando para cuidar de las instalaciones durante la noche.
  • Ujieres. Pueden ser regulares o voluntarios.
  • Instructores bíblicos voluntarios. De doce a veinte miembros escogidos son preparados en un cursillo de seis semanas.
  • Grupo de correspondencia. Ayudan a la secretaria en el envío de invitaciones semanales, sermones, etc.
  • Lista de visitación. A cada miembro se le pide que indique por lo menos diez especialidades en que le gustaría trabajar: apóstatas, interesados en la Escuela Radio postal, etc.
  • Comisiones de Cruz Roja y de primeros auxilios.
  • Técnicos. Sistemas de luces, parlantes, grabación, etc.
  • Actividades de asistencia social. Integrado por miembros de la Sociedad Dorcas. Ropa, alimentos y consejos a los necesitados.
  • Escuela Bíblica de Vacaciones. Auspiciada por los Deptos. de Escuela Sabática. Se realiza en una carpa (dura tres semanas).
  • Portero. Limpia las carpas diariamente.
  • Propaganda. Distribución de avisos en la ciudad en lugares estratégicos y en vehículos públicos.
  • Relaciones públicas. Proporciona informes a los medios de difusión; coordinación con entes urbanos para programas en colaboración.

EJECUCIÓN DEL PLAN

Los jefes y subjefes de grupos son elegidos en base a las listas llenadas por los miembros. La secretaria prepara las listas de cada grupo. Se hacen copias a mimeógrafo para cada jefe y ayudante. También el pastor, su asistente y los asociados tendrán copias. Mientras los miembros llenan los formularios, el órgano toca suavemente o el coro canta. Generalmente concedemos cinco minutos para esta tarea, y entonces los ujieres recogen los formularios.

Cinco semanas antes del lanzamiento de la campaña se celebran reuniones con cada grupo, definiendo sus deberes y recomendando fidelidad. Se realizan reuniones semanales con los jefes, repasando sus planes y haciendo sugerencias.

El sábado antes del lanzamiento, cuando todos los obreros regulares pasan al frente para la consagración, los jefes de cada grupo también lo hacen. Todos los miembros del grupo son invitados a ponerse de pie en sus lugares para la consagración. Esta ceremonia tiene la finalidad de hacer que los obreros de los grupos de trabajo sientan la importancia de su labor.

Sobre el autor: Pastor en Cleveland, Ohio