Según un estudio realizado en conjunto por el Instituto Locomotiva y la revista de la Semana de accesibilidad de los sordos, hay 10,7 millones de personas con deficiencia auditiva en el Brasil. De este total, 2,3 millones tienen discapacidades graves. La sordera afecta al 54 % de los hombres y al 46 % de las mujeres. ¿Cómo podemos llegar a estas personas con el mensaje del evangelio eterno? En esta entrevista, el pastor Douglas Silva, primer pastor adventista sordo del Brasil, reflexiona sobre la importancia del Ministerio de las Posibilidades en la iglesia local. Graduado en Teología por la Facultad Adventista de Amazonia (FAAMA), actualmente ejerce su ministerio en São Paulo. Casado con Karen Sanches, la pareja tiene dos hijos: Lucas y Felipe.

1. Pastor Douglas, ¿nos contarías un poco sobre tu conversión?

Nací en São Paulo, en 1987. A la edad de cinco años, perdí la audición cuando me golpearon en la cabeza mientras jugaba con compañeros de clase en la escuela. Empecé a usar un audífono, pero no me ayudó mucho. Cuando tenía 15 años, cuando vivíamos en Hortolândia, el profesor Jorge Batista me invitó a conocer el grupo de sordos de la Unasp-HT. Era un día sábado, y el predicador era el Pr. Braguiña. Ese día fue notable para mí, porque mientras el pastor predicaba, observé la reacción de la gente. En ese momento sentí el deseo de entender la predicación, pero para eso necesitaría aprender lenguaje de señas. Entonces conocí a Fagner y Fernando, que son adventistas sordos; y me enseñaron el lenguaje de señas. Después de algún tiempo, volví a asistir al servicio. Ese día, el pastor predicó sobre el regreso de Jesús. ¡Entendí todo! Ese mensaje fue parte del comienzo de mi conversión, porque antes no tenía tan presente la venida de Jesús. Después de recibir estudios bíblicos con Marco Antônio, profesor de clases bíblicas para sordos, me decidí por el bautismo. Me bauticé durante CONASI, el Congreso Nacional Adventista de Sordos e Intérpretes, en Hortolândia, en 2004.

2. ¿Cómo fue el proceso de vocación pastoral?

Después de mi bautismo, tuve el deseo de llevar el mensaje a los sordos. Formé un dúo misionero con Edson Sá, uno de los pioneros de este ministerio en el Brasil, y empezamos a visitar muchos hogares para sordos. Los sábados, enseñaba una clase de Escuela Sabática para sordos y, a veces, predicaba en una iglesia o viajaba para ver otros ministerios para sordos. En una de estas visitas conocí a Karen Sanches, quien es sorda, y era profesora de clases de Biblia en el Ministerio de Sordos en Maringá, Paraná. Nos casamos en 2010. Fue con su apoyo y el de mi grupo que decidí estudiar Teología.

Hasta entonces, no había pastores adventistas sordos en Brasil. Era un sueño de nuestra comunidad, y terminó convirtiéndose en el mío también. En 2011, me matriculé en el SALT-FAAMA, en Pará. El director y profesor Davi Tavares fue un gran apoyo durante los cuatro años del curso. También me acompañó la incansable misionera Nazaré Aires, quien fue mi intérprete durante la mayor parte del curso. Me conmueve recordar que, en la graduación, recibió un honor por su dedicación. También estuvo presente en esa ocasión el pastor Jeff Jordan, primer pastor adventista sordo, graduado de la Universidad de Andrews. Por la gracia de Dios, fui el segundo pastor sordo en el mundo adventista y el primero en Brasil.

3. ¿Cómo es su ministerio actualmente?

Poco después de graduarme en 2014, me llamó el Pr. Sidionil Biazzi para trabajar en la Asociación Paulistana. Él tiene un hijo sordo, Sidionil Constantino, y me propuso montar una iglesia para sordos. Empecé reuniendo a dirigentes sordos e intérpretes de nuestra Asociación para hacer realidad este sueño juntos. Con el apoyo del proyecto de plantación de iglesias de Antioquia y varios pastores del interior, logramos inaugurar el Espacio Comunidad Sorda, en la Avenida 9 de Julio, 50, Bela Vista, en el Centro Histórico de São Paulo. Además de ser una iglesia, también es un centro de influencia para la comunidad sorda, donde ofrecemos cursos de señas, charlas, ferias de salud y encuentros para sordos, familiares y amigos de sordos. Tengo el privilegio de pastorear a más de cincuenta miembros sordos.

4. ¿Cuáles son los desafíos en su comunidad?

Los mayores desafíos de hoy son crecer y multiplicarse. El discipulado ha sido el enfoque principal de nuestro ministerio. Esperamos que nuevas iglesias similares a la nuestra aparezcan en otras partes de São Paulo y Brasil. También queremos que cada distrito tenga al menos un intérprete, como una forma de ofrecer accesibilidad para los sordos. Es muy gratificante ver a una persona sorda involucrada activamente en la misión. En Apocalipsis 14:6 y 7 leemos que el evangelio será predicado en todos los idiomas y todos los pueblos. La comunidad sorda es nuestra gente y las señas es nuestro idioma. Estamos haciendo nuestra parte, y creo que somos guiados por el Espíritu Santo en este trabajo. Espero que pronto se cumpla la profecía de Isaías 29:18: “En aquel día los sordos oirán las palabras del libro, y los ciegos, librados de las tinieblas, las verán”.

5. ¿Cómo observa la forma en que la iglesia ha tratado a las personas con discapacidades?

Durante mucho tiempo, la iglesia tuvo dificultades para tratar con personas con discapacidades. Sin embargo, hoy es bastante diferente. La gente se preocupa más por la accesibilidad. El Ministerio de Posibilidades permite mayor preparación humana, y también más recursos. Este ministerio surgió en una reunión del Dr. Larry Evans, exdirector de Stewardship and Deaf Ministries en la Asociación General, con su equipo de trabajo, del cual yo era miembro. Todos luchamos para hacer realidad esta idea y hoy, gracias a Dios, es parte de la iglesia adventista en todo el mundo.

El Ministerio de Posibilidades ha llamado la atención sobre la accesibilidad, y muchas personas sordas han acudido a la iglesia en busca de recursos. Estamos tratando de hacer frente a la gran demanda de producción de materiales de evangelización. Además, desde hace más de ocho años, se desarrolla una excelente iniciativa evangelizadora, Evangelibras, producida por la División Sudamericana. Tuve el privilegio de ser el predicador la mayor parte de esos años. Actualmente, este proyecto es liderado por el pastor Alacy Barbosa, responsable del Ministerio de Posibilidades en DSA. Nuestra intención es que este evangelismo se lleve a cabo en cada Unión. Así, involucraremos a más líderes y alcanzaremos a más personas sordas para Cristo.

6. ¿Qué consejo daría a los pastores y los líderes de la iglesia?

Mi consejo para todos, incluidos los que forman parte del Ministerio de Posibilidades, es que sean más empáticos. Jesús fue sensible con los sordos, los ciegos, los cojos, las viudas y los huérfanos. Debemos seguir su ejemplo y prestar más atención a estas personas. Tal vez los necesitamos más de lo que ellos nos necesitan a nosotros. Elena de White escribió: “Vi que en la providencia de Dios las viudas y los huérfanos, los ciegos, los sordos, los cojos y los afligidos en una diversidad de formas, han sido colocados en estrecha relación cristiana con su iglesia para probar a su pueblo y desarrollar su verdadero carácter. […] Si profesamos la verdadera religión de la Biblia, sentiremos que tenemos con Cristo una deuda de amor, bondad e interés en favor de sus hermanos” (Elena de White, Testimonios para la iglesia, t. 3, p. 561).