Todos sabemos algo de la iglesia que existía al lado de la puerta del Edén, la iglesia en el desierto, la iglesia apostólica, las iglesias de Roma, Antioquía, Corinto, Éfeso y Colosas y las siete iglesias del Apocalipsis. Pero hay otras iglesias bíblicas, muy pequeñas, poco conocidas, pero de valor inestimable.

 I. Cuatro pequeñas iglesias del hogar

1. La iglesia de la casa de Nimias. (Col. 4:15.)

2. La iglesia de la casa de Filemón. (File. 1, 2.)

3. La iglesia de la casa de Aquila y Priscila en Roma. (Rom. 16:3-5.)

4. La iglesia en la casa de Aquila y Priscila en Corinto. (1 Cor. 16:19.)

 Aquila y Priscila, una pareja próspera y famosa, tenía dos iglesias, una en Roma y la otra en Corinto. Tal como Abrahán, doquiera llegaban, levantaban un altar a Dios. ¿Lo hace Ud. también?

 La fama de estas pequeñas iglesias ha trascendido a través de las edades y ha llegado hasta nosotros. Como pequeños jalones luminosos alumbran invariablemente a través de los siglos. Dios las amó y desea que nosotros las amemos también; por eso registró su existencia en el Libro. Cada pequeña iglesia era perfecta en sí misma, y estaba encuadrada por cuatro paredes. ‘‘Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre…” (Mat. 18:20.) Debiera haber una iglesia en cada hogar: en el vuestro y en el mío. La iglesia en el hogar es muy semejante a la pública.

 II. Las iglesias públicas y las del hogar están dedicadas al Señor

1. Para que se convierta en iglesia, la casa debe ser estrenada [dedicada]. (Deut. 20:5)

2. Un hogar dedicado es un lugar muy sagrado, un pequeño cielo.

3. Es un lugar en el cual Jesús, el Espíritu Santo y los ángeles desean morar.

4. De allí que debemos ser muy cuidadosos con lo que entra en nuestro hogar.

 III. El orden en la iglesia del hogar

1. El culto, la oración, el estudio, el trabajo, la comida, los juegos y el descanso, todo debiera tener su tiempo. (1 Cor. 14:33, 40.)

2. Debemos aprender a vivir veinticuatro horas por día.

3. La iglesia del hogar debe tener sus normas. (1 Tim. 3:4, 5.)

4. Sólo los que son obedientes aman en realidad a Dios. (Juan 14:15.)

5. Los niños buenos aman a sus padres lo suficiente como para obedecerlos.

 IV. El estudio en la iglesia del hogar

1. La Sagrada Escritura siempre está en primer lugar. (Hech. 17:10-12.)

2. Enséñese a los niños las Escrituras bien al comienzo de su vida. (2 Tim. 3:15.)

3. Debiera servirse por lo menos dos veces al día el pan del Padre celestial.

V. Las reuniones de oración en la iglesia del hogar

1. Las oraciones elevadas en el hogar fueron respondidas y dieron por resultado que Pedro saliera de la cárcel. (Hech. 12:5, 12.)

2. Los padres tienen la ayuda de Dios en la obra de salvar a sus hijos. (Isa. 49:25)

VI. Las conversiones en la iglesia del hogar

1. Las conversiones en el hogar. (File. 2, 9, 10, 15-19.)

2. Noé llevó a sus hijos, a su esposa y a las de sus hijos al arca. (Heb. 11:7.)

1 Jesús dijo que nuestro tiempo sería semejante al de Noé. (Mat. 24:37.)

VII La advertencia final

1. Cuando Dios pregunte: “¿Dónde está el rebaño que te fue dado?” (Jer. 13:20.)

2. Los padres responderán: “He aquí, yo y los hijos que me dio Dios.” (Heb. 2: 13.)

3. El hecho de que tenemos una iglesia en el hogar significa que tenemos un hogar en la iglesia.

4. Pasamos seis días en la iglesia del hogar. Esto significa que el sábado el hogar es para nosotros la iglesia.

 ¡Que Dios bendiga ricamente a todos los Beteles, las pequeñas iglesias del hogar!

Sobre el autor: Pastor jubilado de la Unión Central de los Estados Unidos.