Todos los años, millares de adventistas participan de retiros espirituales organizados por la iglesia. Eventos como esos comprenden una serie de detalles que, si son ignorados, podrán comprometer el impacto espiritual de la programación. Para ayudarte, me gustaría presentarte algunos consejos importantes que serán decisivos en la organización de tu campamento.

Equipo

 ¡No trabajes solo! Involucra a los líderes jóvenes de tu iglesia/distrito. Delega responsabilidades, y acompaña su ejecución. Marca fechas, y reúne al equipo para presentar la puesta en marcha de la pauta planificada.

Emplazamiento

 Ve con anticipación al lugar del campamento, realiza una visita cuidadosa e intenta imaginar la ocurrencia de las peores situaciones. Evalúa los riesgos que peñascos, piscinas, ríos, tanques, lagos y campo con animales comporten para los acampantes, especialmente para los niños. Identifica las áreas peligrosas y, si es necesario, sepáralas. Sé precavido y piensa, por ejemplo, en la posibilidad de una lluvia torrencial, un vendaval, falta de energía, interferencias externas, atención médica de emergencia, etc. En caso de que llueva, ¿hay resguardo para los participantes del evento? Si se acaba la energía, ¿cuenta con un generador? Si no lo hay, ¿qué alternativas ofrece el sitio y para qué tipo de actividades recreativas? ¿Cuál es el hospital más próximo?

Campamento

 Observa si el lugar es lo suficientemente plano, si es necesario cortar el césped, si hay pedazos de hierro o de vidrio en el suelo, y si existen árboles con ramas muy finas, podridas o con frutos que puedan llegar a caer y herir a alguien. Delimita un área para hombres, otra para mujeres y otra para los matrimonios.

Agua

 Observa la capacidad que ofrece el lugar de suplir agua. Nunca vi al responsable por un espacio de campamento decir que hubiera problemas con la falta de agua; sin embargo, eso ha complicado muchos campamentos. Por lo tanto, prueba la presión y la capacidad de almacenamiento. Está comprobado que el consumo promedio por día por acampante es de 60 a 80 litros. Preocúpate, especialmente, del tiempo de reposición en los depósitos. Ten, si es posible, una bomba de agua para cualquier emergencia, y el contacto de un camión que ofrezca agua potable en la región. Indica un responsable para administrar el consumo del agua durante el evento.

Presupuesto

 Los imprevistos suceden, pero pueden ser minimizados si el presupuesto está bien organizado. Por lo tanto, reserva del 10 al 15 % de los recursos financieros para emergencias.

Alimentación

 Si es posible, cuenta con el auxilio de un profesional de la nutrición para proyectar el menú, siguiendo una dieta vegetariana u ovo-lacto-vegetariana. Ten cuidado con el almacenamiento de los alimentos, y nunca los dejes en contacto con el suelo. Los alimentos perecederos deben permanecer refrigerados. Garantiza, también, que la cocina tenga las mejores condiciones posibles de higiene y limpieza. Una de las peores cosas que pueden suceder en un campamento es un episodio de intoxicación alimenticia.

Programación

 Generalmente, el público de un retiro de verano es heterogéneo; hay personas de todas las edades. Por lo tanto, está atento en relación con los horarios de despertar y de ir a dormir: ni muy temprano ni muy tarde. Recuerda que esta también es una oportunidad de descanso; por lo tanto, no sobrecargues la programación.

 Antes del inicio de los encuentros, prueba los equipamientos de sonido, multimedios e iluminación, con la finalidad de evitar problemas de última hora. Está preparado para imprevistos con los miembros del equipo organizador, y hasta incluso con el orador principal del evento. Combina momentos de reflexión, en los que las personas estén sentadas, con momentos de interacción, cuando el público se tenga que mover.

 Preferentemente, no dejes el mensaje espiritual como la última parte. Aunque existen personas que defienden la idea de que el sermón debe ser lo último, para que los acampantes descansen pensando en lo que escucharon, la realidad es que muchos, especialmente niños y ancianos, no consiguen absorber nada más, pues ya están durmiéndose.

Seguro

 Crea un evento en el sistema de gerencia del Ministerio Joven, campamento de verano, por ejemplo, y contrata el seguro de todos los participantes. Eso es fundamental para preservar a los acampantes, a quien organiza el retiro y a la iglesia. Accede: https://goo.gl/kMQ3Xp

 Un campamento bien organizado promoverá recreación, inspiración y motivación para estrechar relaciones y profundizar el andar con Jesús.

Sobre el autor: director del Ministerio Joven para la región Centro-Oeste del Brasil