La enseñanza adventista del séptimo día sobre los eventos de los últimos días está basada en la Escritura y en los escritos de Elena de White. Juntos, nos proveen de un adelanto bastante detallado de lo que nos espera en el futuro.

Eventos del fin en las Escrituras

Los acontecimientos descritos en Apocalipsis 12 al 14, son centrales para la escatología adventista del séptimo día. En el capítulo 12, se esboza la historia de la iglesia cristiana desde el siglo I d.C. hasta el tiempo delfín.

El capítulo termina con la afirmación de que Satanás está haciendo guerra contra el remanente del pueblo de Dios (12:17). En el capítulo 13, el clímax de esta guerra es retratado en términos simbólicos. La primera bestia del mar (Papado) y la segunda bestia, que sale de la tierra (Estados Unidos protestante), trabajan juntas para imponer su marca de adoración sobre todo el mundo.

La segunda bestia forzará a todo el mundo, bajo amenaza de muerte, a adorar a la primera bestia y a su imagen, y a aceptar la marca de la bestia. La liberación para aquellos que se rehúsan a acatar las órdenes de la segunda bestia llega en el capítulo 14, donde la segunda venida de Cristo le pone fin a la historia humana de pecado.

Bosquejo escatológico de Elena de White

Elena de White detalló tres períodos de tiempo distintivos en su paradigma escatológico, cada uno con eventos específicos:

A. El tiempo del Juicio previo al advenimiento, o Investigador, que concluye con el cierre del tiempo de prueba.

B. El gran tiempo de angustia que sigue luego del fin del tiempo de prueba y termina con el segundo advenimiento.

C. El milenio, que comienza con la segunda venida, y termina con la resurrección de los impíos y su destrucción final en el lago de fuego.

A. Eventos durante el período de tiempo del Juicio Investigador

En sus visiones, se le mostró a Elena de White que, previamente al fin del tiempo de gracia, ocurrirían los siguientes eventos:

a. En el cielo: Sesionará el Juicio Investigador, que analiza las vidas de aquellos cuyos nombres se hallan inscritos en el Libro de la Vida.

b. En la Tierra: Poco antes del fin del tiempo de gracia, se formará una imagen de la bestia, y se promulgarán leyes dominicales a escala mundial que terminarán en decretos de muerte y la recepción de la marca de la bestia. Este período es conocido como el pequeño tiempo de angustia (Eventos de los últimos días, p. 147).[1]

Elena de White no proveyó una secuencia cronológica para estos eventos en la iglesia. Muchos pueden ocurrir en forma simultánea. Pero, cuando el decreto de Apocalipsis 22:11 sea emitido, todos estos acontecimientos habrán finalizado y el gran tiempo de angustia comenzará. Ella nunca menciona un marco de tiempo para estos sucesos, pero sí dice que “los movimientos finales serán rápidos” (Testimonios para la iglesia, t. 9, p.11). 11).

1. Reavivamiento/reforma en la iglesia:

El reavivamiento y la reforma en la iglesia la preparan para los eventos finales y el fuerte pregón. Este reavivamiento y reforma incluirá milagros de sanidad y conversiones genuinas (Testimonios para la iglesia, t. 9, pp. 102, 103). Elena de White también dice que Satanás hará todo lo posible para impedir que ocurra este reavivamiento, introduciendo una falsificación en el mundo cristiano.

“El enemigo de las almas desea impedir esta obra; y antes de que llegue el tiempo para que se produzca tal movimiento tratará de evitarlo introduciendo una falsa imitación. Hará parecer como que la bendición especial de Dios es derramada sobre las iglesias que puede colocar bajo su poder seductor […]. Bajo un disfraz religioso, Satanás tratará de extender su influencia sobre el mundo cristiano” (El conflicto de los siglos, p. 517).

Esto nos ayuda a entender mejor las palabras de Pablo en 2 Tesalonicenses 2:8 y 9: “Entonces se manifestará aquel inicuo […] cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos”.

2. El sellamiento:

A fin de preparar a sus hijos para el tiempo de angustia, Dios desea colocar su sello en la frente de cada uno de ellos. “No se trata de un sello o marca que se pueda ver, sino de un afianzamiento en la verdad, tanto intelectual como espiritualmente, de modo que los sellados son inconmovibles” (CBA, t. 4, p. 1.183) cuando llegue el tiempo de angustia.

3. La lluvia tardía:

La lluvia tardía es prometida en Joel 2:23, 28 y 29. De la misma manera que la iglesia apostólica recibió la lluvia temprana en Pentecostés, la iglesia remanente recibirá la lluvia tardía, que la habilitará para terminar la obra (El conflicto de los siglos, p. 669).

Esta promesa es para nosotros hoy, no solamente para el futuro. Pero, debemos estar preparados para recibirla. Esto significa que debemos dejar a un lado todo pecado y buscar al Señor con humildad (Testimonios para la iglesia, t. 6, PP- 57, 58).

4. El fuerte clamor:

El mensaje de la caída de Babilonia, tal como es dado por el segundo ángel (Apoc. 14:8), es repetido en el mensaje del ángel de Apocalipsis 18:4 y 5. La obra de este ángel se une a la gran obra final del mensaje del tercer ángel, al convertirse en un fuerte clamor (Primeros escritos, p. 277; Mensajes selectos, t. 2, p. 135).

5. El zarandeo:

El zarandeo se refiere a la purificación del pueblo de Dios. Será causado por:

A. El testimonio directo del Testigo Verdadero a Laodicea (Primeros escritos, p. 270).

B. La introducción de falsas teorías (Testimonios para los ministros, p. 112).

Muchos adventistas abandonarán la iglesia porque no están plenamente convertidos (Testimonios para la iglesia, t. 4, p. 92).

6. El tiempo de prueba temprano:

Antes del fin del tiempo de gracia, habrá un tiempo de angustia para el mundo y para la iglesia. Aumentarán los problemas políticos, financieros y sociales (Luc. 21:25). Elena de White se refiere a este tiempo en Primeros escritos cuando dice: “Al empezar el tiempo de angustia, fuimos henchidos del Espíritu Santo, cuando salimos a proclamar más plenamente el sábado” (p. 33). Más adelante, en el mismo libro, Elena de White explica:

“El comienzo ‘del tiempo de angustia’ mencionado entonces no se refiere al tiempo cuando comenzarán a ser derramadas las plagas, sino a un corto período precisamente antes de que caigan, mientras Cristo está en el Santuario. En ese tiempo, cuando se esté terminando la obra de la salvación, vendrá aflicción sobre la Tierra, y las naciones se airarán, aunque serán mantenidas en jaque para que no impidan la realización de la obra del tercer ángel” (Primeros escritos, p. 85).

7. La imagen de lo bestia:

La imagen de la bestia se formará cuando las iglesias protestantes en los Estados Unidos se unan con el Estado para utilizar el poder de este a fin de hacer cumplir sus decretos y sostener las instituciones de la iglesia (CBA, t. 7, p. 987).

8. Satanás personifica la venida de Cristo:

Elena de White declara que “el acto que coronará el gran drama del engaño será que el mismo Satanás se hará pasar por Cristo” (El conflicto de los siglos, p.682). Esto arroja luz sobre las palabras de Jesús en Mateo 24:24 sobre los falsos cristos.

9. Leyes dominicales:

Desde que Constantino emitió la primera ley dominical en el año 321 d.C., ha habido leyes dominicales en muchos países, incluyendo los Estados Unidos. Pero, en el pasado, las leyes dominicales promulgadas en ese país eran limitadas por las leyes de los Estados provinciales y del país, y se referían a actividades comerciales. Apocalipsis 13 predice que, en el futuro, las leyes dominicales serán nacionales, e incluso internacionales, y que tales decretos incluirán observancias religiosas.

Apocalipsis 13:3 también profetiza que irá “toda la tierra en pos de la bestia”. Esto, según Elena de White, significa que:

“Cuando los Estados Unidos, el país de la libertad religiosa, se una con el Papado para forzar la conciencia y obligar a los hombres a honrar el falso día de reposo, los habitantes de todo país del globo serán inducidos a seguir su ejemplo” (Testimonios para la iglesia, p. 27).

10. La marca de la bestia:

Desde el principio, los adventistas del séptimo día han conectado la “marca de la bestia” con una observancia del domingo impuesta por el Estado en el futuro, como una muestra de sumisión a Roma. Elena de White escribió:

“[…] Cuando la observancia del domingo sea impuesta por ley, y el mundo sea iluminado con respecto a la obligación del verdadero día de descanso, entonces el que transgrediere el mandamiento de Dios, para obedecer un precepto que no tiene mayor autoridad que la de Roma […] aceptarán de hecho el signo de la sumisión a Roma: la marca de la bestia” (El conflicto de los siglos, pp. 502, 503).

Sin embargo, “nadie hasta ahora ha recibido la marca de la bestia. El tiempo de prueba no ha llegado aún” (El evangelismo, p. 174).

11. El decreto de muerte:

Según Apocalipsis 13:15, la imposición de las leyes dominicales, con el tiempo, llevará a una pena de muerte, antes del fin del tiempo de gracia. Esto es sustentado por Apocalipsis 20:4, que dice que habrá mártires en la crisis final, porque rehusaron adorar a la bestia o a su imagen.

El 6 de agosto de 1890, Elena de White les escribió una carta a “el hermano y la hermana Garmire”, quienes, sobre la base de algunas visiones espurias, enseñaban que la imagen de la bestia surgiría después del fin del tiempo de prueba. En su respuesta, Elena de White afirmó:

“El Señor me ha mostrado definidamente que la imagen de la bestia se formará antes de la terminación del tiempo de gracia; y esto debido a que constituirá una gran prueba para el pueblo de Dios, mediante la cual se decidirá su destino eterno. En Apocalipsis 13 se presenta con claridad este asunto […]. Esta es la prueba por la que deben pasar los hijos de Dios antes de ser sellados” (Mensajes selectos, t. 2, p. 92; Maranata: el Señor viene, p. 162).[2]

12. Terminación del tiempo degrada:

La terminación del tiempo de gracia indicará el fin del ministerio de Cristo en el cielo. La obra de investigación y juicio habrá terminado, y la puerta de la misericordia se cerrará (El conflicto de los siglos, p. 481). Cuando Apocalipsis 22:11 sea proclamado, “el sello del Dios vivo estará sobre su pueblo” (Testimonios para la iglesia, t. 5, p. 198).

B. Eventos durante el gran tiempo de angustia

Luego de la terminación del tiempo de gracia, Elena de White vio el gran tiempo de angustia, el derramamiento de las siete últimas plagas y el tiempo de angustia de Jacob. Este gran tiempo de angustia tiene su clímax en la batalla de Armagedón, durante la sexta plaga, y en una resurrección parcial en el día de la segunda venida de Cristo, cuando ocurrirá la primera resurrección y el traslado de los justos. Luego de estos eventos, vendrá el milenio.

1. El tiempo de angustia de Jacob:

El tiempo de angustia de Jacob, al que se refiere Jeremías 30:7, comienza en realidad con el decreto de muerte (El conflicto de los siglos, p. 673), antes del fin de tiempo de gracia, pero se extiende a lo largo de una buena parte del gran tiempo de angustia. Al igual que Jacob, que aunque había confesado sus pecados de todos modos luchó con Dios (Gén. 32), el pueblo de Dios experimentará un tiempo de angustia y un profundo sentimiento de indignidad. “Pero […] no tienen culpas escondidas que revelar. Sus pecados han sido traídos previamente a juicio y han sido borrados, y no pueden recordarlos” (El conflicto de los siglos, p. 620).

2. Las siete últimas plagas son derramadas:

Daniel 12:1: El gran tiempo de angustia comienza con el fin del tiempo de gracia. Es el momento en que las siete últimas plagas caerán sobre la Tierra. Se ha agotado la paciencia de Dios. Los malvados han sobrepasado los límites de su tiempo de prueba, y el Espíritu de Dios por fin se ha retirado. “Entonces Satanás sumirá a los habitantes de la Tierra en una gran tribulación final” (El conflicto de los siglos, p. 672).

3. Armagedón:

Apocalipsis 16:12-16: Los tres espíritus inmundos (espíritus de demonios) salen de la boca del dragón (espiritismo), la bestia (el Papado) y el falso profeta (protestantismo apóstata). Estos preparan a los poderes de este mundo para una batalla final contra Dios y su pueblo. Dondequiera que el pueblo de Dios está en peligro por causa del enemigo, allí ocurre el Armagedón. En el momento de mayor peligro, sin embargo, aparece Jesús en las nubes de los cielos para rescatar a su pueblo (Primeros escritos, p. 284).

4. Resurrección parcial:

Justo antes de que aparezca Cristo, hay una resurrección parcial (Dan. 12:2; Apoc. 1:7).

“Todos los que murieron en la fe del mensaje del tercer ángel salen glorificados de la tumba y oyen el pacto de paz que Dios hace con los que han guardado su ley. los que lo traspasaron’, los que se mofaron y se rieron de la agonía del Cristo moribundo, y los oponentes más violentos de su verdad y su pueblo, son resucitados para contemplarlo en su gloria, y ver el honor conferido a los fieles y obedientes” (El conflicto de los siglos, p. 695).

5. La segunda venida:

Cuando Cristo regrese, ocurre la primera resurrección (Apoc. 20:4, 5; El conflicto de los siglos, p. 702). Los que estén vivos y hayan aceptado a Jesús como su Salvador serán trasladados (1 Tes. 4:17; El conflicto de los siglos, p. 703) y los no creyentes serán destruidos (2 Tes. 2:8; El Deseado de todas las gentes, p. 83). En ese momento comenzará el milenio.

C. Eventos durante el tiempo del milenio

Elena de White describe el tiempo del milenio como el período en que los malvados serán juzgados. Durante ese tiempo, Satanás y sus ángeles están confinados a la Tierra, que se encuentra devastada y en ruinas (Apoc. 20:1-3). Al final de este período, los malvados son resucitados; Satanás los dirige en un último intento por derrocar el gobierno de Dios en la Santa Ciudad, pero el diablo y sus seguidores son destruidos por fuego que desciende del cielo (Apoc. 20:7-10). Luego de estos eventos, la Tierra es recreada como el hogar de los redimidos.

1. El juicio de los impíos:

Durante el milenio ocurre el juicio de los impíos. Este es el momento en que “los santos han de juzgar al mundo” (1 Cor. 6:2,3). “Junto con Cristo, juzgan a los impíos, comparando sus actos con el libro de la ley, la Biblia, y fallando cada caso en conformidad con los hechos realizados cuando estaban en su cuerpo” (La fe por la cual vivo, p. 218).

2. La Tierra en ruinas /Satanás atado:

Durante el milenio, la Tierra será el hogar de Satanás y sus ángeles malvados. Limitado a ella, no tendrá acceso a otros mundos para tentar a sus habitantes. “En este sentido es que está atado: no queda nadie sobre quien pueda ejercer su poder” (El conflicto de los siglos, p. 717).

3. Resurrección de los impíos y lo batalla final de Satanás:

Al final del milenio, Jesús regresa nuevamente a la Tierra. La ciudad de Dios desciende y se asienta sobre la planicie preparada para ella. Entonces, Jesús sale de la ciudad y llama a los impíos muertos. Según Elena de White, los impíos, al salir de sus tumbas, “reanudaban el curso de sus pensamientos donde lo había interrumpido la muerte. Conservaban el mismo afán de vencer que los había dominado al caer en el campo de batalla” [Primeros escritos, p. 293), “llevan las huellas de la enfermedad y la muerte” (El conflicto de los siglos, p. 720). Satanás los engaña para que ataquen la Santa Ciudad, pero desciende fuego de Dios sobre ellos, y son consumidos.

4. La Tierra Nueva:

El fuego que consume a los impíos purificará la Tierra. Todo vestigio de la maldición será eliminada y la Tierra será hecha nueva (El conflicto de los siglos, p. 732).

Sobre el autor: Director asociado del Instituto de Investigación Bíblica de la Asociación General.


Referencias

[1] Donald E. Mansell, The Shape of the Coming Crisis (Nampa, ID: Pacific Press, 1998), p. 310.

[2] Pareciera que Elena de White está hablando de dos decretos de muerte: uno antes y otro después de la terminación del tiempo de gracia, porque en El conflicto de los siglos, página 673, ella habla de un decreto de muerte después del fin del tiempo de prueba.