1. Reorganice sus prioridades de manera tal que no le impidan disponer de un momento diario de tranquila meditación, y permita que Dios lo aligere de algunas de las cargas que lo están agobiando. Concentre su atención en el hecho de que la obra es de Dios; usted es responsable sólo por lo que el Señor le ha confiado.
2. Realice ejercicios vigorosos al aire libre diariamente, duerma lo necesario, y coma alimentos apropiados en cantidades moderadas. (Un régimen rico en fibras y pobre en azúcar y grasas es lo mejor.) Disfrute del contacto con la naturaleza o trabaje en su jardín todos los días.
3. Desarrolle una actitud de gozo y agradecimiento por la vida. Cante y alabe a Dios. Exprese su gratitud a otras personas. Posea una agradable sonrisa.
4. En los momentos que requieran profunda concentración o cuando deba resolver un problema, tómese un recreo de cinco minutos para dar un paseo y disfrutar del canto de los pájaros, las flores o el juego de los niños. Relájese: usted está en las manos del Creador.
5. Descanse un día por semana además del día de adoración.
6. Dedique tiempo para estar con algún ser amado, disfrute de la comunión con él y exprésele su afecto. El cónyuge o los buenos amigos son importantes para su bienestar.
7. Sea el amo de su tiempo; no permita que las circunstancias controlen su vida.
8. Aprenda algo nuevo. No necesita asistir a clases para ello. Todo lo que le llame la atención y signifique un cambio en su rutina puede servir para aliviar las tensiones.
9. Evite el empleo de estimulantes para elevar el ánimo. El alcohol, los tranquilizantes, el café, el té y el tabaco sólo agotan sus reservas de energías y le dan una falsa sensación de bienestar. Limite el tiempo que dedica a mirar televisión.
10. Enumere los dones que Dios le ha dado y que utiliza a diario. Trate de desarrollarlos bajo la dirección del Espíritu en vez de perseguir el “éxito” y pedirle a Dios que bendiga sus egoístas esfuerzos personales.
Sobre el autor: La Dra. Ruth M. White es directora asociada del Departamento de Salud de la Asociación General.