Aunque el siguiente estudio trata sólo de los factores que afectan el crecimiento en las iglesias adventistas en Norteamérica, los lectores de otras partes del mundo y aun de otras denominaciones seguramente encontrarán paralelos y aplicaciones a sus propias situaciones. -Los editores.

El movimiento para el crecimiento de la iglesia ha atraído críticas porque, entre otras cosas, tiene como su mayor prioridad laganancia de nuevos miembros. Esto distrae laatención, dicen los críticos, de la misión permanente de la iglesia, de ministrar las necesidadesde toda la comunidad y servir como conciencia

  Somos rápidos para admitir que el mero añadir números a los registros de la iglesia sin integrar verdaderamente a los nuevos conversos a la vida de la congregación o nutrir su crecimiento espiritual no sólo es servirse a sí mismo sino contraproducente. Y seguramente podremos estar de acuerdo en que la iglesia tiene una responsabilidad hacia la sociedad. Sin embargo, la palabra final de Cristo a sus seguidores fue una comisión destinada a ir a todas las naciones, bautizar a los creyentes, y hacer discípulos de ellos (véase Mat. 28:18-20). A menos que una iglesia esté experimentando un crecimiento en base a conversiones, a menos que la gente esté escuchando el Evangelio, dejando el mundo y uniéndose al cuerpo de Cristo, esa iglesia no está cumpliendo su misión.

  En la década pasada, un gran número de las principales denominaciones protestantes ha ¡do declinando en su membresía. Otras han crecido rápidamente. Dentro de una determinada denominación, algunas congregaciones están creciendo rápidamente mientras que otras crecen lentamente, no crecen, o aún decaen. Los Adventistas del Séptimo Día han disfrutado de un crecimiento razonablemente bueno comparado con muchas denominaciones. Sin embargo, las iglesias adventistas, individualmente, muestran la misma amplia variedad de rango de crecimiento que se encuentra en otras denominaciones. ¿Por qué?

  La División Norteamericana de los Adventistas del Séptimo Día comisionó al Instituto del Ministerio de la Iglesia, en la Universidad de Andrews, para que dirigiera una investigación sobre el crecimiento en iglesias adventistas en los Estados Unidos y Canadá. Su propósito: identificar los factores institucionales locales que están asociados con el rápido crecimiento de la iglesia, al igual que los que están asociados con el mínimo crecimiento o declinación. Tal información puede permitir a los pastores y otros destacar los factores más productivos, y también provee una base para desarrollar materiales de instrucción y enseñanza.

Métodos

  Usando el método de muestreo al azar, 295 iglesias adventistas a través de la División Norteamericana fueron seleccionadas. Todo el muestreo fue subdividido en iglesias de blancos, de habla inglesa, de negros y de habla hispana. Se pidió al pastor de cada iglesia seleccionada que completara una encuesta personal y que pidiera a cada miembro de su congregación presente en un determinado sábado a la hora del culto, que complete una encuesta similar.

  Las encuestas fueron orientadas especialmente a medir actitudes, conductas y factores que posiblemente pueden estar relacionados con el crecimiento de la iglesia. Los puntos investigados fueron seleccionados después de una revisión de la literatura en cuanto al crecimiento de la iglesia, análisis de cuestionarios de presidentes de uniones y asociaciones locales, y entrevistas con pastores “de éxito”. La encuesta dirigida al pastor contenía 68 ítems; la encuesta del miembro contenía 43 ítems. Todos los resultados de una iglesia en particular fueron promediados para cada ítem, a fin de proveer una serie de respuestas que pudiera representar a esa iglesia o comunidad.

  Las encuestas fueron suministradas durante el fin de la primavera y el verano de 1980. Los pastores de 250 iglesias entregaron sus encuestas, un rango de respuesta del 85%. Un total de 194 iglesias enviaron 8.336 encuestas completas de miembros, un rango de respuesta del 66%.

   Para medir cuánto creció una iglesia, los registros que cubrían los 18 meses entre el 1º de enero de 1979 y el 30 de junio de 1980 fueron usados como referencia. Se emplearon dos diferentes medidas de crecimiento (o declinación). El crecimiento real fue obtenido al restar la cifra de membresía de una iglesia al 1° de enero de 1979 de la membresía al 30 de junio de 1980, y dividir el resultado por la membresía inicial. Esta cifra fue expresada como porcentaje, con hasta un decimal. En casos donde el resultado representaba un rango de declinación, se usó el signo negativo. El promedio de crecimiento real para el año y medio fue del 6,1%, o un 4,1% anual.

   Además, se usó una medida que descartaba el crecimiento o pérdida por transferencia de miembros establecidos en una iglesia u otra. Esto podría revelar cómo se comportaba una iglesia en términos de adición por conversión y pérdidas por apostasía. Esto fue designado como crecimiento de reino, y fue calculado al restar el número de miembros eliminados por apostasía y desaparecidos, del número sumado por bautismos y profesión de fe durante el período bajo estudio. El resultado fue dividido por la cifra de membresía inicial y expresado como porcentaje hasta un decimal. El promedio del crecimiento de reino para los 18 meses fue 7,8%, o cerca del 5,2% anual.

  Cada ítem de la encuesta del pastor fue correlacionado tanto con el crecimiento real como el crecimiento de reino para la iglesia que se investigaba. Se usó un programa de regresión múltiple que no sólo reveló correlaciones directas sino que también calculaba una ecuación de predicción en la cual una serie de ítems fueron escogidos y que, tomados en conjunto, proveían la mejor explicación para la variación de los rangos de crecimiento. El programa también determinó el orden de fortaleza de cada ítem elegido en la ecuación. También fue llevado a cabo en todo el muestreo y también en las iglesias blancas, negras e hispanas en forma separada. El proceso total fue repetido para el muestreo de miembros.

Resultados de la encuesta a pastores

  Cuando los 68 ítems de la encuesta a los pastores fueron comparados tanto con el crecimiento real como el de reino, comenzó a surgir un gráfico. Ciertas respuestas estaban definidamente asociadas con cada una o con ambas medias de crecimiento. Cuando se considera todo el muestreo, los siguientes ítems, más o menos en orden de importancia, parecen ser los mejores elementos que predicen una iglesia en crecimiento:

   1. Centralización del crecimiento de la iglesia. Se les preguntó a los pastores: “¿Hasta qué punto cada aspecto de la actividad de la iglesia se centraliza en el crecimiento de la iglesia?’’ Aquellos cuya respuesta tendía hacia una completa centralización en esta área eran pastores de iglesias en crecimiento.

  Peter Wagner pone en lista como una de las siete señales vitales comunes a las iglesias saludables y crecientes en América, el hecho de que tienen claras sus prioridades. También dice: “La condición indispensable para una iglesia que crece es que desea crecer y está dispuesta a pagar el precio del crecimiento”. El estudio actual ha confirmado esto para las iglesias adventistas. En las iglesias que crecen, no se permite que nada en el programa tenga otro ideal que no sea la ganancia de almas; cada actividad individual ha sido diseñada hacia la ganancia de almas.

  Podría agregarse, sin embargo, que el crecimiento de la iglesia no es meramente bautizar gente. También incluye incorporarlos a una membresía de iglesia responsable y equiparlos para un servicio posterior. Tiene tanto interés en la calidad como en la cantidad.

  2. Porcentaje de membresía que asiste regularmente a la reunión de oración. La asistencia a la reunión de oración abarcaba de un 1 a un 98%, con un promedio de cerca del 25% que asiste regularmente. Las iglesias con una buena cantidad de miembros que asistían a la reunión de oración estaban creciendo en la vida espiritual así como en números; su rango de apostasía/bautismos era pequeño.

3. Porcentaje de miembros que se reunían en grupos pequeños o de estudio. La gente se siente atraída hacia una iglesia donde hay calidez personal e interés, donde no sólo pueden celebrar su servicio de adoración sino pueden sentirse parte de una familia. La gente, ya sean actualmente miembros de iglesia o estén considerándolo todavía, se sentirán atraídos hacia un grupo en el que se atienden sus necesidades personales.

4. Fe en el potencial de crecimiento. Se pidió a los pastores que establecieran el potencial de crecimiento de sus iglesias locales en una escala desde “ningún potencial” a “potencial ¡limitado”. Los que indicaban un alto potencial pastoreaban iglesias que experimentaban un rápido crecimiento. Mientras que podríamos asumir que los pastores sabían lo que sus iglesias eran capaces de hacer, es más probable que los resultados representen el principio espiritual, “de acuerdo a vuestra fe os será hecho”. Puesto en palabras simples, no podemos hacer nada a menos que creamos que podemos. Esta variable está relacionada con la idea del “pensamiento positivo” que tan bien ha sido articulado por Robert Schuller.

5. Reuniones públicas, efectivas en bautismos. Se pidió a los pastores que determinaran cuán efectivas habían demostrado ser las reuniones públicas evangelizadoras en sus iglesias como método para lograr bautismos. Cuando se consideraba efectivo el método, había una relación directa con ambos índices de crecimiento de iglesia. Aparentemente, la edad de la evangelización pública no ha pasado. Las iglesias que crecen están encontrando efectivo este método.

6. Pericia en las decisiones personales. Se pidió a los pastores que determinaran su pericia desde “bajo” a “alto” en obtener decisiones para Cristo durante la visitación personal. Los altos porcentajes estaban relacionados con el crecimiento real. Una iglesia que crece tiene un pastor que se siente cómodo hablando con la gente en un nivel personal en cuanto a cosas espirituales, y puede llevarlos a un compromiso con Jesucristo.

7. Tiempo empleado en administración. Se pidió a los pastores que indicaran el promedio de porcentaje de su tiempo que pasaban en la administración de la iglesia. En los crecimientos reales y de reino, la correlación fue negativa. Esto indica que las iglesias que crecen tienen pastores que pasan una parte relativamente pequeña de su tiempo en tareas administrativas. Los pastores necesitan ser liberados de mucha de la maquinaria que significa mover la iglesia, a fin de dedicarse a la ganancia directa de almas y a entrenar a los miembros en el ejercicio de sus dones espirituales.

8. La clase bíblica del pastor. Siendo que los bautismos prueban una significativa correlación con una clase bíblica del pastor que funcionaba durante la escuela sabática, debiera darse más énfasis a esta actividad. La investigación revela que cualquier sábado, en una iglesia en veinte funciona una clase bíblica a cargo del pastor.

9. Número de series evangelizadoras realizadas. Se preguntó a los pastores cuántas series evangelizadoras tuvieron lugar en la zona de su iglesia durante el año anterior. Las respuestas estaban significativamente relacionadas con el crecimiento de reino. Este índice está estrictamente relacionado con el índice número 5.

El muestreo en iglesias de blancos

  Cada uno de los nueve índices del crecimiento de iglesia presentados antes para el muestreo total también influyó en la encuesta de miembros blancos y aproximadamente en el mismo orden. La centralización del crecimiento de la iglesia fue el factor más importante tanto para el crecimiento real como para el de reino. La reunión de oración, los grupos pequeños de estudio, la fe en el potencial de crecimiento, las reuniones de evangelización pública y la habilidad en las decisiones personales, todas tuvieron fuerte apoyo. Pero además, aparecieron otros tres índices en el muestreo de miembros blancos:

 1. El blanco de crecimiento de iglesia. Se pidió a los pastores que determinaran el blanco de crecimiento de su iglesia para el año, en términos de un porcentaje de su actual membresía. Las respuestas abarcaron desde “ningún blanco” (25 iglesias) a una iglesia que había puesto como su blanco de crecimiento ¡ciento por ciento de su membresía! Los blancos más elevados estaban relacionados con el crecimiento de iglesia en una de las más fuertes relaciones descubiertas por el estudio.

 2. Nivel educacional de la congregación. De acuerdo a la investigación, cuanto más altamente educada es la congregación blanca, más posible es que experimente tanto crecimiento real como de reino.

 3. Tiempo prioritario en el ministerio a los miembros. Se preguntó a los pastores qué porcentaje de su tiempo les gustaría invertir en el ministerio a los miembros. Aquellos que deseaban tener un menor porcentaje de tiempo en el ministerio interno eran los que pertenecían a iglesias en crecimiento. Esto probablemente significa que están orientados en su misión hacia el mundo antes que a un estilo de pastorear la iglesia.

El muestreo de miembros negros

 Los indicadores de crecimiento real y de reino en la muestra de negros han demostrado ser muy diferentes de los del muestreo de blancos y el total. Son como siguen:

 1. Porcentaje de miembros en clases de testimonio. Se preguntó a los pastores qué porcentaje de su membresía estaba en o se había graduado de clases de testimonio o dar estudios bíblicos. Un alto porcentaje como respuesta estaba significativamente relacionado tanto con el crecimiento real como de reino.

 2. Estilo de liderazgo. Se pidió a los pastores que determinaran su estilo de liderazgo en una escala de “yo hago la mayoría de las decisiones” a “los miembros manejan la iglesia”. El estilo más democrático demostró ser más favorable tanto para el crecimiento real como el de reino.

 3. Accesibilidad de la iglesia a los posibles conversos. Este sorprendente hallazgo demostró relación negativa tanto en el crecimiento real como el de reino; ¡cuanto más inaccesible la iglesia, más crece! Sin embargo, se requiere más estudio y pensamiento para una interpretación válida de este factor.

 4. Estudio de la comunidad local. “¿Cuánto esfuerzo ha invertido su iglesia en un estudio de su comunidad local, su conformación y necesidades?” Mucho estudio se relacionaba positivamente con el crecimiento real.

 5. Ministerio de salud, efectivo en bautismos. El considerar los ministerios de salud como un método efectivo de asegurar bautismos estuvo asociado tanto con el crecimiento real como el de reino.

 6. Ministerio para todas las edades. Se preguntó a los pastores cuán completamente conducían sus iglesias a un ministerio para todas las edades. Las que tenían programas para todas las edades eran iglesias que crecían. Mientras este factor puede parecer un trabajo interno, recuerde que la gente se unirá a una iglesia donde sus necesidades sean satisfechas.

El muestreo en las iglesias de habla hispana

  La encuesta hispana resultó similar a los otros muestreos en algunos aspectos, mientras que difería en otros. Cinco de los indicadores para el crecimiento de iglesia que se encontraban en los muestreos total y de blancos también se encontraron en la encuesta hispana: centralización en el crecimiento de iglesia, fe en el potencial de crecimiento, porcentaje de la membresía que asistía a la reunión de oración, número de reuniones evangelizadoras que se realizaban en el área de la iglesia, y la clase bíblica del pastor como muy efectiva en asegurar bautismos.

  La encuesta hispana también compartía dos indicadores de crecimiento de iglesia con el muestreo de miembros negros: la correlación negativa con la accesibilidad de la iglesia y el porcentaje de miembros de iglesia enrolados o graduados de clases de testimonio o del arte de dar estudios bíblicos.

Pero la encuesta hispana también tuvo otros tres fuertes indicadores que no se encontraron en los otros grupos:

 1. Porcentaje involucrado en esfuerzo personal. Se pidió a los pastores que dieran el porcentaje de sus congregaciones que estaban activamente ocupadas en alguna forma de esfuerzo personal hacia los no miembros. Un alto porcentaje fue asociado tanto con el crecimiento real como el de reino.

 2. Estudios bíblicos a cargo del pastor, efectivos en producir bautismos. Esta medida también se relacionó tanto con el crecimiento real como el de reino.

 3. Tiempo prioritario en el ministerio a los no miembros. Se pidió a los pastores que hicieran una lista de la proporción de su tiempo que les gustaría emplear trabajando personalmente por los no miembros de iglesia. Un alto porcentaje se relacionaba tanto con el crecimiento real como el de reino.

 Hallazgos de la encuesta de miembros

   Los siguientes indicadores parecían ser los mejores predictores promedios de una iglesia en crecimiento, como lo indican los resultados del muestreo de miembros. En términos de toda la encuesta, se presentan más o menos en el orden de su importancia:

 1. Una iglesia ganadora de almas. Es fácil seleccionar esto como el factor número uno porque tuvo la más alta correlación tanto con el crecimiento real como el de reino. También esto fue cierto para las encuestas de blancos e hispanos.

Se pidió a los miembros que calificaran sus iglesias en una escala de 1 a 5 como ganadoras de almas. Los que tenían mayores rangos tendían a ser las iglesias en crecimiento. Aquí opera un fenómeno similar a la variable “fe en el potencial de crecimiento” que se encontró en el muestreo de pastores como un buen indicio del crecimiento de la iglesia. Así como el pastor necesita el “pensamiento positivo”, de la misma forma los miembros. Hay un tipo de espíritu de equipo aquí: “¡Dios está trabajando a través de nosotros! ¡Estamos en sociedad con El! Nuestra iglesia toma en serio el cumplimiento de la comisión divina”. Cuando algunos sienten que su iglesia existe para el propósito de traer gente a Cristo, las cosas empiezan a ocurrir.

 2. Años como adventista bautizado. Las iglesias donde la mayoría de los miembros han estado en la iglesia por 20 o más años no están creciendo. Las iglesias que crecen tienen una gran proporción de sus miembros compuesta por conversos recientes. Esto es lógico. Los nuevos conversos son potencialmente los mejores ganadores de almas porque todavía tienen muchos contactos con personas que no son de la iglesia, en el ambiente del cual provienen. Los adventistas que han sido miembros por muchos años encuentran que la mayoría de sus amigos más cercanos y su ambiente social está entre miembros de iglesia. Sencillamente, no tienen las puertas abiertas de los recientemente bautizados. Y a menudo el nuevo converso en su primer amor, será más activo en contar a sus amigos lo que Dios ha hecho por él.

 3. Cantidad de entradas familiares. Este factor es difícil de explicar en términos de crecimiento de iglesia, pero mostró una buena relación. Las congregaciones con mayor promedio de ingresos tendían a crecer más rápidamente. Quizás esto es porque hay más dinero disponible para invertir en un programa de ganancia de almas. Quizá también la congregación más solvente se ve como más prestigiosa por la comunidad que la rodea y tiene mejores facilidades. Esto puede ilustrar el principio sociológico de que la gente desea más afiliarse a un grupo al cual admira y respeta.

 4. Seguridad en Dios. Donde los miembros tienen más certeza de estar en una relación correcta con Dios, la iglesia tiende a crecer. La gente no puede compartir lo que no tiene. Un intento de proclamar las verdades del mensaje de la iglesia que no esté respaldado por vidas transformadas que experimentan una vida gozosa y satisfactoria sólo puede terminar con palabras vacías. Cuando los miembros de iglesia saben que son perdonados, justificados y llenos del espíritu, estarán en condiciones de “ir a casa y contar cuán grandes cosas el Señor ha hecho con ellos”. Y los oyentes responderán.

 5. Cargos en la iglesia o posición de servicio. Cuando más grande es la proporción de la congregación que se ha puesto a trabajar en la iglesia, es más fácil que tengan un buen crecimiento. Los pastores solos no pueden cumplir toda la misión. A medida que los miembros se ven activamente involucrados en la vida de la iglesia, sienten el compromiso hacia ella y la responsabilidad de ayudar a cumplir sus ideales. Deben encontrarse maneras de volver a los miembros pasivos en activos. Esta variable tuvo un mayor poder de selección todavía en el grupo de blancos.

 La encuesta de blancos

De los cinco indicadores del crecimiento de iglesia mencionados antes, todos excepto “seguridad en Dios” fueron firmes selectores en el muestreo de blancos. Además, las iglesias de blancos tenían tres otros importantes indicadores:

  1. El pastor pone énfasis en la ganancia de almas. Se pidió a los miembros que calificaran el énfasis que su pastor pone en la ganancia de almas en una escala de 1 a 5. El crecimiento es más común en aquellas congregaciones donde el pastor tiene como promedio un alto porcentaje. El pastor es definidamente el líder del crecimiento de la iglesia. Mientras que no pueda hacer todo por sí mismo, sus miembros toman el ejemplo de él. Si él está constantemente poniendo la ganancia de las almas y el crecimiento de la iglesia en la categoría de alta prioridad, también lo harán ellos. Si lo relega a un papel inferior, la congregación abandonará su esfuerzo.

2. Nuevos miembros involucrados en la iglesia. Se pidió que calificaran la actitud de la iglesia hacia los nuevos miembros en una escala de “ignorados” a “involucrados”. Las iglesias que crecen involucran en el trabajo a sus nuevos conversos. La gente está más dispuesta a unirse a una iglesia donde se siente necesitada. Los miembros involucrados se sienten menos tentados a desanimarse y apostatar.

3. Años de asistencia a las escuelas adventistas. Las iglesias que crecen tienen como promedio más tiempo empleado por sus miembros en la educación, cristiana. La escuela adventista provee un canal para el crecimiento biológico. También provee un poder sustentador, controlando la apostasía y facilitando así el crecimiento de iglesia.

Encuesta de hermanos negros

 La encuesta en el caso de los negros fue similar a la encuesta total al seleccionar “una iglesia ganadora de almas” y “años como adventista bautizado”. Además de esto, había dos selecciones únicas:

1. Asistencia a un programa de entrenamiento para testificación en el último año. En las iglesias de miembros negros esto mostró la más fuerte relación con el crecimiento real. El correcto entrenamiento de los miembros es necesario y puede hacer una diferencia.

2. Seguridad en los dones espirituales. En iglesias negras donde una alta proporción de la membresía está muy segura de que se han identificado con los dones espirituales, el crecimiento real y de reino es más frecuente. El movimiento del crecimiento de iglesia se ha interesado mucho con la identificación con los dones espirituales. Para que las iglesias crezcan, los miembros no sólo sienten que están involucrados, sino que deben cumplir aquellas tareas para las que Dios los ha dotado en la forma mejor.

La encuesta hispana

 La encuesta hispana reveló algunas de las mismas correlaciones como en la encuesta total. Dos otras variables fueron selecciones únicas para este grupo:

1. Trabajar para ganar a familiares no adventistas. Las iglesias con gran proporción de la membresía que informa que están trabajando activamente para ganar a sus familiares no adventistas son iglesias que experimentan crecimiento de reino.

2. Edad. Cuanto más joven es el promedio de edad de la membresía bautizada, es más fácil que la iglesia siga creciendo.

Conclusiones

 Un examen de los hallazgos que han sido presentados sugiere algunas conclusiones:

1. La División Norteamericana está compuesta mayormente de pequeñas iglesias. Los programas y estrategias deben ser planeada de tal forma que no dependan de grandes congregaciones, facilidades amplias o equipo sofisticado. Deben ser capaces de ser dirigidas por pastores multiglesias.

2. No hay ventaja de tamaño en lo que a crecimiento de iglesia se refiere. Iglesias pequeñas, medias o grandes todas pueden crecer según el mismo esquema si otras condiciones son iguales. Los pastores y miembros de iglesias pequeñas no necesitan desanimarse y sentir que no tienen una base suficiente desde la cual trabajar. Los pastores y miembros de iglesias grandes no deben sentir que la tarea de hacer rendir un buen porcentaje es demasiado hercúlea. Toda iglesia puede crecer si sus dirigentes y miembros realmente desean que crezca.

3. Hay algunas diferencias en las condiciones que facilitan el crecimiento entre la iglesia total en Norteamérica y sus componentes étnicos. Las iglesias blancas tienden a tener indicadores de crecimiento muy similares a promedio general. Las iglesias negras, mientras que comparten algunos indicadores comunes, tienden a crecer bajo condiciones muy diferentes del total de las iglesias en muchas formas. Las iglesias hispanas tienden a tener algunos indicadores en común con los otros grupos más unos pocos que son únicos.

4. El crecimiento de iglesia es el resultado del esfuerzo concentrado y planificación. No hay mayor hallazgo en el estudio del que revela que el crecimiento no ocurre sencillamente. La iglesia que crece se fija una ratio de crecí-, miento anual. Todo lo que ocurre en esa iglesia se concentra en alcanzar ese blanco. Todo otro programa del ministerio es evaluado en la medida en que contribuye a alcanzar ese blanco. El pastor pone énfasis principal en la ganancia de almas. Emplea menos tiempo en las tareas administrativas de la iglesia y en el ministerio de rutina a miembros y dedica mayor proporción de su tiempo en el ministerio a los que no son miembros de iglesia y al entrenamiento de los laicos. La iglesia estudia y sabe cómo es su comunidad local. Orienta sus programas para que alcance las necesidades de esa comunidad.

5. El crecimiento de iglesia es una aventura en fe. El pastor es un “pensador positivo” que sueña con grandes visiones. Cree en el potencial que tiene su iglesia para crecer. Cree que nada puede detenerla del crecimiento. Los miembros también están llenos de gran expectativa. Tienen un gran sentido de camaradería. Son un equipo que trabaja unido para Dios. Saben que su iglesia es una iglesia ganadora de almas.

6. El crecimiento de iglesia viene a medida que la membresía desarrolla una profunda vida espiritual. Se reúnen para orar y alabar a Dios. Se reúnen en pequeños grupos de camaradería y de estudio señalados por el amor y el interés mutuos. Tienen seguridad de que sus pecados son perdonados y son aceptados por Dios. Se identifican, aceptan y usan sus dones espirituales particulares. Dios añade su bendición a estas congregaciones con la llegada de nuevos conversos. Cuando la iglesia tiene calidad, se le puede confiar con cantidad. Es un ambiente seguro para nuevos miembros.

7. El crecimiento de iglesia viene a una congregación que está entrenada y trabaja. Es„ más común que los miembros tengan un nivel educativo más elevado que las iglesias que no crecen, y es más común que la educación sea obtenida en escuelas adventistas. Los miembros tienen un papel prominente en hacer decisiones y operar la iglesia. Un gran porcentaje tiene cargos en la iglesia o tienen otras posiciones de servicio. Se alistan y gradúan de clases sobre cómo testificar y dar estudios bíblicos. Ponen esa información para hacer buen uso de ella. Están activamente ocupados en varias formas de ministerio agresivo hacia los que están dentro del círculo de su influencia y especialmente hacia sus familiares no adventistas.

8. El crecimiento de la iglesia se encuentra donde los nuevos miembros son rápidamente incorporados a la vida de la iglesia. Los conversos no son ignorados sino que se les da una tarea significativa que hacer. Un alto porcentaje de las congregaciones que crecen consisten en miembros relativamente recientes que en su celo por su primer amor están compartiendo su testimonio con sus amigos no convertidos. Esta iglesia tiende a tener un promedio de miembros más jóvenes, también. La gente joven y las familias jóvenes son esenciales para el crecimiento de la iglesia.

9. El crecimiento de la iglesia sigue el uso de los métodos apropiados. Se hace uso hábil de la evangelización pública. El pastor tiene su clase bíblica durante la escuela sabática. Visita a miembros en perspectiva en sus hogares, estudia la Biblia con ellos, y ha desarrollado su habilidad como ganador de almas. La iglesia se extiende hacia las necesidades de la comunidad con varios enfoques creativos.

10. El crecimiento de la iglesia, tanto numérico como espiritual, aumenta cuando se controla y elimina la apostasía. Esto se logra mejor estimulando la vida espiritual de los miembros, involucrándolos activamente en la vida interna y de testimonio de la iglesia, y creando un clima que es cálido, amigable y amante.