Se le atribuye a Billy Graham la siguiente frase: “El joven quiere un himno para cantar, una bandera para seguir, una causa para defender”.
En cada corazón joven existe una profunda necesidad de ser útil, de servir. La falta de satisfacción de esas necesidades responde en gran medida a la indiferencia espiritual de muchos.
La forma más exaltada de servicio, la que más califica espiritualmente es la de ofrecer una feliz opción de vida eterna al prójimo más cercano, que todavía hoy continúa frente a dos caminos, víctima de los asaltos de la duda y la desesperanza.
Ayudemos al joven adventista a ayudarse espiritualmente, motivándolo, adiestrándolo para el trabajo en favor de otros. En este trabajo él se encontrará y hallará además la tan buscada felicidad interior.
¿La mejor hora para hacer todo esto? Semana Evangelística de la Juventud, del 17 al 23 de septiembre de 1972. Como pastor no haga solo el trabajo que les corresponde a los jóvenes de su iglesia; póngalos a trabajar. ¡Ellos aceptarán el desafío! Después le agradecerán la oportunidad que Ud. les dio de servir.
Recuerde: la semana del 17 al 23 de septiembre es la hora del joven.