Dame, Señor, voluntad fuerte para servir a mi iglesia y a sus instituciones, trabajando a tiempo y fuera de tiempo; dame previsión para contemplar con optimismo el futuro, haciendo la parte que esperas de mí, a fin de convertir tu causa en una empresa de éxito, y visión celestial para conducir a tu pueblo hacia adelante y hacia arriba.

Permíteme tener una comunión constante contigo, de modo que pueda reflejar tu imagen; dame fuerzas para soportar la crítica y la ofensa, y para perdonar y amar a quien me las hiciere. Hazme humilde para reconocer mis equivocaciones y corregir mis errores. Concédeme desarrollar la cualidad de saber escuchar, reconociendo la importancia de mi interlocutor, valorando sus ideas y dándole el crédito que merece cuando, al ponerlas en práctica, me conduzcan al éxito.

Enséñame a trabajar en equipo, a inspirar confianza en quienes dependen de mí, a ejercer la disciplina suficiente para respetar a mis superiores y manifestar la lealtad que ellos, la causa y tú esperan de mí. Bríndame la fuerza de carácter necesaria para rechazar la adulación y los aplausos, y comprender que son una trampa del diablo para estimular la suficiencia propia y hacer que no sienta la dependencia de ti. No me dejes caer en la crítica destructiva; haz que cuando vea un defecto en mi compañero de labor, le ayude a superar su falta con tacto, amor y consejo, en lugar de destruir su reputación hablando mal de él a sus espaldas.

Dame que tenga el orgullo santo de cumplir con mi deber, respetar mi elevada posición, enalteciéndola con una conducta recta, justa, a toda prueba, y la fortaleza para soportar el poco valor que algunos le dan. Permíteme llevar la cruz antes que la corona, y al fin de mi tarea concédeme la inmensa satisfacción de haber cumplido con mi deber, habiendo hecho tu voluntad en tal forma que pueda tener tu aprobación y esperar confiado tu venida. Y dame ahora la inmensa alegría de trabajar para tu causa con amor. Te lo pido en el nombre y por los méritos de Jesús. Amén.

Sobre el autor: Presidente de la Misión Colombiana del Pacífico