“Una ayuda en la preparación de un pueblo para el encuentro con su Dios”.
El pastor Jean Carlos Zukowski es oriundo de San Pablo, Rep. del Brasil. Es adventista de tercera generación en su familia. Se graduó en Teología en el Centro Universitario Adventista de San Pablo, en 1988. Pastoreó iglesias y actuó como asistente del departamento de Jóvenes en la Asociación Paulista Central. Es Doctor en Teología por la Universidad Andrews, Estados Unidos, donde también enseñó. Actualmente, es profesor de la Facultad de Teología del Centro Universitario Adventista, Campus Engenheiro Coelho. Está casado con lracéli, profesora y especialista en Consejería, y tienen una hija, Karoline. La mayor parte de sus 27 años de ministerio fue dedicada a la enseñanza, en lo cual se destaca como un mentor de aquellos que serán los futuros heraldos de la proclamación del evangelio de nuestro Señor Jesucristo.
El XI Simposio Bíblico- Teológico Sudamericano, realizado entre el 31 de abril y el 5 de mayo, en el Centro Universitario Adventista de San Pablo, Campus Engenheiro Coelho, tuvo como tema: “Elena G. de White: Vida y ministerio”. Hable un poco sobre el simposio.
El Simposio Bíblico Teológico es un programa de la División Sudamericana de la Iglesia Adventista del Séptimo Día realizado cada dos años. Este tema fue escogido debido al centenario de la muerte de Elena de White (falleció el 16 de julio de 1915), y para recordar la importancia del llamado que Dios Le hizo. Siendo que este tema es muy peculiar del adventismo, y ha sido estudiado durante toda su historia, el Simposio intentó colocar en perspectiva la relevancia del ministerio de Elena de White en el contexto actual de la Iglesia Adventista. Los trabajos del Simposio fueron divididos en cinco áreas:(1) Vida y obras de Elena de White; (2) Elena de White y el estilo de vida adventista; (3) Elena de White y las crisis del adventismo; (4) Elena de White y la perspectiva bíblico-profética adventista; y (5) Elena de White y temas emergentes (problemáticas y desafíos en cuanto al profetismo en el contexto actual). Para conducir los trabajos y la presentación de los temas, fueron invitados los líderes de los centros de investigación de Elena G. de White de los Estados Unidos y de América del Sur, como así también doctores y académicos del Instituto de Investigaciones Bíblicas de la Asociación General, y de las universidades adventistas de América del Sur y del Norte.
La inspiración de Elena de White ¿se equipara al “mismo” nivel que los profetas bíblicos?
Dios usa diferentes maneras para comunicarse con el hombre. Él se revela por medio de la naturaleza y de la conciencia humana. También se reveló por medio de teofanías, ángeles, sueños y visiones. De manera especial, Dios usó a escritores y profetas para traernos su palabra, y a Jesús, la revelación expresa del Padre. Los mensajes divinos revelados a-los profetas eran posteriormente transmitidos, por ellos, de forma verbal, escrita o dramatizada, proceso conocido como inspiración. Algunos estudiosos defienden la teoría de la inspiración verbal. Es decir, la idea de que el profeta solamente escribió aquello que Dios dictó. En esta teoría, el profeta no tuvo ningún control sobre lo que escribió, sin ejercer su cognición en el proceso de la transmisión del mensaje recibido. Un análisis cuidadoso de la Biblia demuestra que algunos autores usaron fuentes externas en la composición de sus libros. Por ejemplo, el Evangelio de Lucas. Otro punto que hace inviable la inspiración verbal es la existencia de diferentes estilos literarios y errores gramaticales en la Biblia. Si Dios hubiese dictado el contenido a los profetas y los escritores de su Palabra, habría siempre un mismo estilo y ningún error. Esos hechos indican que, en la inspiración bíblica, el profeta ejercía la cognición y la voluntad cuando transmitía de forma escrita o hablada el producto de la revelación. EI proceso de la inspiración implica la unión de 1o divino con lo humano. En ella, el profeta trabaja de forma dinámica, siendo dirigido por el Espíritu en la selección de las palabras para transmitir la revelación. Esta teoría es conocida como inspiración plenaria o del pensamiento. ¿Será, entonces, que existe una diferencia de inspiración entre los profetas canónicos y los no canónicos? La respuesta a esta pregunta es no. Elías es ejemplo de un profeta no canónico, considerado en la Biblia como uno de los mayores profetas. ¿Sería la inspiración de Elías inferior a la de Moisés porque Moisés es un autor bíblico? No. El Espíritu inspira de forma igual al profeta canónico y al no canónico; no hay diferencia en el proceso de inspiración. La diferencia está en la función y en el propósito. Si el Espíritu llama a alguien para el ministerio profético, este debe ser juzgado por la Biblia, y todo 1o que dice debe estar en conformidad con ella. Él puede, incluso, ampliar el entendimiento de un principio bíblico, clarificándolo para el tiempo y el lugar en los que vive. Siendo así, como Elena de White está en conformidad con todos los requisitos bíblicos exigidos para ser un profeta, su inspiración está en el mismo nivel que la de los escritores y los profetas de la Biblia. Sin embargo, ella no fue llamada para establecer nuevos principios o reglas que no estuvieran presentes en la Biblia.
Plagio es una de las acusaciones más recurrentes a la persona de Elena de White como escritora. ¿Qué pruebas/argumentos refutan esto?
Por definición, plagio es apropiarse de la producción literaria de alguien sin darle el debido crédito. El plagiador omite de quién obtuvo su materia. En el caso de Elena de White, ella afirma haber usado materiales de otros autores y los recomendó a sus lectores. Actitud poco común para quien quiere hacer plagio. En la introducción del libro El conflicto de los siglos, ella dice que muchos autores describieron de forma primorosa aquello que ella había visto en visión, y ella usó sus escritos en la obra citando parte de frases o frases enteras, y dio el debido crédito. En algunos casos, sin embargo, ella afirma que usó frases de otros autores porque describían apropiadamente aquello que ella había visto en visión, pero no citó al autor, para que el lector no tuviese la impresión de que la fuente de la información fuese el autor en cuestión. Ella quería dejar en claro que la información allí descrita era de origen divino. La cantidad de material de otros autores que se halla en sus escritos no sobrepasa el 2%, y el uso de escritos de otros autores sin referencia es menor al 1%. El abogado estadounidense Vincent L. Ramik, especialista en derechos autorales y cuestiones que implican plagio, analizó los escritos de Elena de White y las críticas sobre plagio en ellos. En su informe final de 27 páginas, él concluyó que ella no realizó plagio, y estuvo dentro de los límites del uso normal para su época. Concluyó también que el uso de otros autores no constituía fraude o intención de suplantar el trabajo de ningún otro autor de su época, y también seguía las leyes actuales. Este informe puede ser encontrado en el sitio del Centro White: http://www.whiteestate.org/issues/ramik.html
Considerando que su inspiración fue dinámica (pensamiento/mente), casi en su totalidad, y verbal (dictado) en una minoría (“El ángel del Señor me dijo…”), ¿podemos admitir, entonces, que hay errores “periféricos” en sus escritos?
Cada profeta, al escribir, usó su conocimiento literario y científico. El estilo literario, como así también ortográfico, no es el de Dios. Dios no transformó al pescador Pedro en el académico Pablo. El estilo de Pablo es más elaborado que el de Pedro. Estas diferencias no quitan de los escritos la autoridad divina contenida en el mensaje que está siendo transmitido. Hay ciertas declaraciones de cuño científico que representan el conocimiento de la época del profeta, y hoy pueden no estar en conformidad con la verdad científica actual, la cual puede también ser diferente de aquí a algunos años. Siendo que la Biblia y los escritos de Elena de White se proponen presentar mensajes que auxilian al ser humano para alcanzar la vida eterna, en ellos pueden encontrarse errores periféricos literarios y científicos que no interfieren con el propósito por el cual fueron escritos.
¿Por qué no todo lo que escribió Elena de White fue publicado?
Las publicaciones de los escritos de Elena de White ocurrieron de la siguiente manera. Ella escribió libros enteros como El Deseado de todas las gentes, El conflicto de los siglos, El camino a Cristo, por ejemplo. Una colección de sus testimonios para la iglesia fue editada en un total de nueve tomos. Ella también envió muchos artículos y descripciones de sus visiones para ser publicados en diferentes revistas de la comunidad adventista de la época. Durante su vida, fueron organizadas compilaciones de sus escritos en forma temática y publicadas como libros. Ella escribió muchas cartas, y al enviarlas mantenía consigo una copia. Algunas de esas cartas fueron publicadas en compilaciones posteriores a su muerte. Sin embargo, muchas de ellas nunca fueron publicadas, aunque están disponibles para investigación. EI Centro de Investigaciones White planea tener hacia el fin de este año todos los escritos de ella disponibles en su sitio web.
¿Cómo debemos interpretar y aplicar sus mensajes?
Básicamente, debemos usar los mismos principios hermenéuticos aplicados a la Biblia: (1) Identificar cuál es el tema central del texto en cuestión. (2) Analizar el contexto inmediato en el que se encuentra. (3) Verificar si ella habló sobre el mismo tema en otros lugares y cuál es el contexto de la cita. ¿Para quién fue escrito? ¿Cuál era el objetivo? (4) Al hacer la aplicación del texto, debemos recordar que los mensajes del Espíritu de Profecía son primeramente mensajes para mí; no lea pensando en los demás. (5) Finalmente, no debemos usar los escritos de Elena de White para “elaborar o construir”, particularmente, nuevas doctrinas.
Sobre los debates actuales en cuestiones como la homofobia, el racismo, los movimientos feministas, entre otros, ¿podemos encontrar orientaciones en los escritos de Elena de White?
Al igual que en la Biblia, podemos encontrar en los escritos de Elena de White principios para los problemas contemporáneos mencionados, aunque ella no haya escrito ningún artículo o libro específico al respecto. Sin embargo, es interesante observar que, en cuanto a los temas contemporáneos, cuando son analizados a la luz de sus escritos, Elena de White presenta ideas revolucionarias para su época. En una de las ponencias del simposio, el Dr. Nicholas Miller presentó cómo el concepto de Elena de White sobre derechos civiles la guió en su activismo social. Ella defendía los derechos fundamentales de igualdad para todos dentro de un contexto de libertad y responsabilidad. Todos fuimos creados iguales ante Dios; por lo tanto, ningún ser humano debe ejercer control sobre otros ni juzgarlos. Ella advierte que la libertad separada de los principios divinos se convierte en un gran problema y una desgracia para la sociedad. Los principios presentados por ella en sus escritos nos proporcionan una guía segura de cómo enfrentar cualquier movimiento social actual en defensa de los derechos de las minorías. Elena de White hizo esto, por ejemplo, en una sociedad que defendía la abolición de la esclavitud, pero no pensaba que los blancos y los negros eran iguales, y ella defendía que todos son iguales ante Dios; que la abolición no era suficiente; que los blancos tenían una deuda con la raza negra, y deberían proporcionar educación y oportunidades iguales de empleo, para que ellos pudiesen tener una vida digna.
¿Cuáles son las “nuevas” que trajo el Simposio? ¿Cuáles son los puntos importantes de la Declaración de Consenso?
El Simposio reafirmó la importancia del don profético en el medio adventista y para el pueblo remanente. Presenta cómo los escritos de Elena de White son relevantes hoy para la preparación del pueblo de Dios para el regreso de Jesús, y también cómo ese pueblo presenta principios que nortean la vida del cristiano ante los desafíos de la sociedad contemporánea. Un punto importante de la Declaración de Consenso es la importancia de los escritos de Elena de White en la toma de decisiones tanto de la iglesia como del individuo, como una luz venida de Dios para su pueblo en este tiempo. Creo que la mayor relevancia de los escritos de Elena de White está en el propósito que ella misma dio a su ministerio: una luz menor para guiar a la Luz mayor, la Biblia, y una ayuda en la preparación de un pueblo para encontrarse con su Dios; estar en pie en el día de su venida, discerniendo los engaños del enemigo para este tiempo.